Por Jorge Eduardo García Pulido
¡Así las cosas! Sergio Chávez Dávalos concluirá en 2027 su tercer ciclo como presidente municipal. Con honestidad, ha perfeccionado su gobierno: trato sensible y optimización eficaz de recursos aun frente a la falta de compromiso estatal. Ha sorteado conflictos con comerciantes y deja un reto claro para su sucesor: ocupar un espacio que no será fácil de llenar.
¿Quiénes tienen oportunidad real?
En esta ocasión las mujeres llevan la preferencia electoral; se mueven con ventaja por arraigo y visibilidad dentro de los sectores clave. Habrá quien apueste por candidaturas puntuales como la regidora Liliana Olea en MORENA o Mary Chuy Reynoso Tostado en Movimiento Ciudadano y la diputada Arizmendi Fombona ha empezado a cocinar gusto con pequeños acercamientos y gestos calculados que le cosechan simpatías. Aun así, Tonalá tiene memoria: los foráneos no ganan, como muestran los casos de Abraham González U., Rosa Alba Ramírez “Nachis” o Roberto Blake. La élite social tonalteca —familias originarias del centro, linajes de abolengo— difícilmente acepta a alguien sin arraigo.
En contraste, los linajes tonaltecas siguen vigentes: políticos de trayectoria que no necesitan levantar la mano para ser reconocidos.
Perfiles en juego
• Oswaldo Báñales Orozco: sensible, experimentado y cercano a la gente. Con más de 28 mil votos, ha logrado captar la atención del doctor Lomelí. Su estructura social lo convierte en un activo para consolidar a MORENA como fuerza principal.
• Jorge Vizcarra Mayorga: alegre, optimista y con visión empresarial. Movimiento Ciudadano cuenta con un candidato de peso; Vizcarra fue clave para hacer ganador a Enrique en Tonalá.
• Hermanos A la Torre y Rocío Acosta: lealtad institucional, sencillez y humanidad. Acción Nacional mantiene vida gracias a su sangre, sudor y fe.
• Don Jorge Arana Arana: ex priísta con sensibilidad política, aunque desgastado por los años. Su hijo Francisco ya genera legado y podría buscar otra oportunidad.
• Edgar López Jaramillo: joven maduro, trabajador y miembro de dinastía panista; mostró desde el inicio chispa distinta y valores familiares sólidos.
• Alejandro Buenrostro: ex líder estudiantil y activista social, dos veces regidor; conoce Tonalá y no dudará en levantar la mano.
• Laura Figueroa: linaje y trayectoria política; figura destacada del PRI y su candidata natural.
• Iván Ruíz y Enrique Díaz: jóvenes promesas que deben ser contempladas; Tonalá necesita refrescar cuadros.
• Diana Luevano: liderazgo social importante; Loma Dorada es clave en votos.
• Dr. Juan Manuel “Tito”: altruista, comprometido y venerado en El Rosario; ahí asegura votos.
En conclusión, estos son, sin matices, los perfiles más fuertes en disputa; entre ellos, las mujeres llevan hoy la preferencia electoral gracias a su arraigo, visibilidad y capacidad de movilización. La carrera está servida entre quienes realmente tienen estructura y posibilidad real de gobernar. Lo dejo a su consideración.
La carrera presidenciable en Tonalá
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