Por Amaury Sánchez
El Diputado Alejandro Puerto, este exregidor de Zapopan decidió que ya era hora de hacer su gran entrada al mundo del espectáculo político, y lo ha hecho a lo grande, con un largo metraje que ni el más ambicioso de los cineastas se atrevería a filmar. Esta primera temporada al mas puro estilo de NETFLIX de la política, nuestro protagonista se desahoga sobre su desencanto con el partido MORENA y sus dirigentes, que, según él, no cumplen los acuerdos. ¿La presidencia municipal de Zapopan? ¿La coordinación de su bancada? ¿O quizás un café que nunca llegó? La verdad, amigos, es que no lo sabemos, pero lo que sí sabemos es que el drama está servido.
En este primer episodio, Alejandro nos cuenta que ha decidido colgar los guantes y salir del cuadrilatero, pero no se preocupen, no se va a convertir en un independiente ni en un miembro de otro partido. ¡No, señor! Él es y seguirá siendo un ferviente obradorista. Es como si dijera: “¡No me voy, solo estoy en un descanso dramático!” Y, claro, eso nos deja a todos preguntándonos: ¿será que se va a lanzar como el nuevo héroe de la política jalisciense, o simplemente está buscando un nuevo escenario para su monólogo?
Lo que realmente llama la atención es el guion que utilizó en su video. ¡Ay, caramba! No parece el producto de un joven audaz y brillante como él, sino más bien de un gran escritor que se tomó su tiempo para hilar cada palabra. ¿Acaso se habrá dejado asesorar por algún dramaturgo de renombre? Porque, seamos sinceros, el guión tiene más dramatismo que una telenovela de las 9 de la noche.
Así que aquí estamos, viendo cómo Alejandro Puerto se convierte en el protagonista de su propia historia, mientras el resto de nosotros nos preguntamos si esto es un acto de valentía política o simplemente un intento de llamar la atención. Al final del día, lo que importa es que el show debe continuar, y nosotros, como buenos espectadores, estaremos aquí para aplaudir, reír y, por supuesto, opinar. ¿Ustedes qué piensan? ¡Que empiece la función!
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